Fantasía del futuro

Ubícate un día del 2016

Me levanto como a eso de las 7:30 para ir a dar la clase de las 9. Saliendo de ahí me dirijo a la oficina para trabajar con el nuevo proyecto de educación en pastillitas de sabores: todo va bien, sólo que las de menta saben a jamaica y las matemáticas euclidianas carecen de proteínas.

Por ahí del mediodía voy a una junta importante donde yo y el presidente platicamos algunas cosas de la pobreza y de cómo ésta no nos afecta desde hace algunos años gracias a que ésta fue abolida. Ahora se llaman poco-ricos en lugar de pobres.

Al terminar mi segunda ración de pechuga a la sidra no dejo de notar cómo, en la mesa de al lado, unas muchachas voltean hasta nuestra mesa. "de seguro quieren mi autógrafo" dice el señor presidente, "vamos, no te engañes" le digo, "tu y yo sabemos que ser presidente ya no impone... querías democracia, ¿no?".


En la tarde, tras dejar un poco meditabundo al tipo, regresé a mi mansión a leer libros sobre la pobreza (están en el estante de ciencia ficción).

Eduardo Perezchica,
un día en la clase de Teoría y Dinámica de Grupos.

Comentarios

Camilo Espinoza dijo…
enfermizos
marginados
peste
pueblo
populum
gente

poco-ricos?
eso es de otro mundo

ADio!
=)

PD: buen blog
Unknown dijo…
Entonces, si le piden autografo no sera porque es el presidente, sino porque es un idolo de la ciencia ficcion.

Entradas populares